No hacer nada...

Kusen, 13 noviembre 2003

No hacer nada

A veces, algunas personas se preguntan qué es lo que hacen en zazen. Fundamentalmente, en zazen ya no se hace nada. Pero no hacer nada parece inconcebible, entonces uno dice que está haciendo algo. Por ejemplo, se observan los pensamientos que aparecen, se observa su vacuidad y se los deja pasar. En realidad, incluso esa actividad de iluminar los fenómenos de nuestra vida que se reflejan en zazen no es algo que hagamos activamente mediante un acto de la voluntad. No hay alguien que haga zazen, que observe, que discrimine, que decida que lo que surge es sin sustancia. Es simplemente un cuerpo y una mente totalmente sentados, estables inspirando y espirando tranquilamente y abandonando toda otra voluntad de actividad. El espíritu se aclara por sí mismo, y todos los fenómenos que surgen son iluminados por el espíritu claro de zazen, pero eso se hace naturalmente por el poder de zazen mismo, más allá de toda voluntad deliberada.

Sin embargo, decidir no hacer nada más, sólo sentarse, no es tan fácil. Tendemos siempre a querer hacer algo si tenemos la impresión de que lo que hacemos no tiene sentido. Así que al principio, efectivamente, podemos hacer zazen, hacemos existir la práctica de zazen concentrándonos en la postura, respiramos observando nuestros pensamientos, nuestras sensaciones, nuestras percepciones, dejándolas pasar. Es como hacer salir un navío del puerto: una vez que hemos izado las velas, entrado en alta mar, entonces el barco avanza por sí mismo, empujado por el viento. Es lo mismo para la práctica de zazen: no es necesario que soplemos sobre las velas.

Roland Yuno Rech: Gyobutsuji nº5, Mujo, La Impermanencia y otros kusenes

Publicación del Dojo Zen Genjo - Pamplona/Iruña