Kusen de Étienne Zeisler sobre el "Tenzo Kyokun" del Maestro Dogen [23/..]
KUSEN
(enseñanza oral durante zazen)
"TENZO KYOKUN"
del
Maestro DOGEN
Comentarios de Ètienne Zeisler
[23/..]
Domingo 12 de octubre 1986. (15:15 h)
En el Tenzo Kyokun Dogen escribe: “Sin que sepamos
nosotros mismos encontrar nuestra propia estabilidad,
¿Cómo podríamos juzgar, sea lo que sea?”
El Zennen Shingi dice: “Que una persona sea idiota o sabia,
es en último caso un monje que practica la Vía. Es pues un
tesoro inestimable para todos los hombres y para todos los
mundos. Incluso si lo justo y lo falso existen, no os atéis a
ningún juicio” El deseo de seguir esta actitud es en sí mismo
la practica de la Vía que actualiza la sabiduría más alta;
anokutara sanmyaku sanbodai, la sabiduría incomparable, la
sabiduría de Buda.
Incluso si lo justo y lo falso existen, no solamente lo justo y lo
falso, sino todo lo que nuestra conciencia personal puede pensar, evaluar, estimar, en el sentido del bien como en el del
mal, no debéis ataros. Es de esto de lo que he hablado esta
mañana. Hishiryo, el pensamiento solitario, único, que
permanece sin compañero. Por ejemplo: durante zazen nos
vienen muchos pensamientos al espíritu. Yo digo siempre: “No
caviléis, no juzguéis si es bueno o malo, justo o falso”. A los
pensamientos que aparecen, dejadlos solos. Si os concentráis
sobre vuestra postura, no os volvéis el compañero de vuestro
ego o de vuestra conciencia limitada.
El Maestro Kodo Sawaki decía: “Zazen es el sí mismo que
construye el sí mismo en el sí mismo” Esto quiere decir: No
utilicéis durante zazen nada de vosotros mismos. Si no
utilizamos nada de nuestro pensamiento, nada de nuestro nopensamiento, estos desaparecerán automáticamente. Todo lo
que crea categorías se desvanece igualmente. Se sea estúpido o
sabio, no es en absoluto importante. Incluso si lo justo y lo
falso existen, no pueden obstruir el firmamento.
Durante zazen no debemos “intentar”, sea lo que sea. Intentar
sobrepasar nuestro ego, no sería otra cosa que crear otro ego. Si
os concentráis completamente sobre vuestra postura, entrad el
mentón, extended la columna vertebral, en ese momento, zazen
en sí mismo hace zazen, y la conciencia personal no es en
absoluto importante. Es ahí donde nuestra actitud en la vida
puede volverse justa, El maestro Keizan llamaba a esto kaku
soku: despertarse y ser real. Nuestra vida en ese momento
puede volverse armoniosa.
Los seres humanos buscan siempre el provecho, la manera de
resolver sus problemas. “Yo hago zazen para resolver mis
problemas” ¿Cuál es la esencia de nuestra vida?¿Cual es el
sentido de nuestra existencia? Se juzga a los otros estúpidos o sabios, buenos o malos, nos juzgamos a nosotros mismos justos
o falsos.
Dogen dice: “No os atéis a ningún juicio” Durante zazen,
aunque queráis escapar, no os es posible. Del mismo modo si
queréis escapar de vuestra vida, tampoco os es posible.
Quedarse, permanecer, es la actitud más alta.
Sensei decía a menudo: “Durante zazen debéis entrar en
vuestro ataúd, volveros completamente solitarios” Estar
sentado sin apoyarse sobre nada, sin depender de nadie. En este
momento podéis comprender que no existe Buda i sabiduría en
el exterior de vosotros mismos, o en las categorías de vuestra
conciencia personal. Y este sí-mismo es Dios o Buda. Y es este
Buda en el interior de nuestro espíritu el que no debemos jamás
olvidar. Si en cada momento, se forma el deseo de no maquillar
este espíritu con cosas tales como lo justo o lo falso, este deseo
en sí mismo, a través de nuestra vida, se vuelve la Vía.
El Maestro Dogen continua: “Al margen de que hayáis
tenido la suerte de encontrar la enseñanza autentica, si en
lo que concierne a este punto, cometéis un error, en ese
momento, equivocareis completamente el camino”.
Continuará...